REFERENTES HISTÓRICAS DE LANZAMIENTO DE PESO: UNA BREVE INTRODUCCIÓN HISTÓRICA

FUENTE: Barris.org

La aparición de la actividad atlética de las mujeres, se remonta, según ciertas evidencias en la Grecia Clásica, al año 396 a.C. cuando según la leyenda, ya tenían programada sus propias competiciones, que se celebraban, pocos meses después, de finalizar los Juegos de los hombres, ya en plena estación otoñal.

Dentro del programa de competiciones, existía una carrera a pié, de unos 170 metros, de la cual, aún se conservan algunas ilustraciones y figuras esculpidas en bronce, donde se  puede apreciar, la silueta de una mujer corriendo.

Según los historiadores de la época, La Princesa espartana, Cinisca, fue la primera mujer campeona olímpica, en los alrededores del Siglo 470 a.C.

Pero todo fue muy breve. Los cambios políticos y sociales de aquellos tiempos, prohibieron tajantemente, que la mujer realizara competencias de esfuerzo, por el convencimiento que había, de que solo los hombres eran los que podían realizarlo.

Esto sucedió en el curso del año 550, junto con un decreto, que prohibía a las mujeres asistir a las competiciones, incluso como meras espectadoras. Ignorar esta normativa, era exponerse a severas sanciones, que podían incluir la pena de muerte. A partir de aquí, el silencio más absoluto, sobre la actividad deportiva de las mujeres.

LOS ANTECEDENTES DE LA ÉPOCA MODERNA

Tuvieron que pasar muchos siglos, hasta encontrar nuevos vestigios, que nos hablaran de una nueva aparición femenina, en una prueba atlética. Esto sucedió en el Vassar College, a finales del Siglo XIX, exactamente en 1895, donde los profesores e historiadores de aquellos ancestrales Juegos de la Antigüedad, Dr. Dio Lewis’s y L.J.Moore, idearon la posibilidad de introducir algunas disciplinas, en su fiesta anual del Field Day, o día de campo, dedicado a todo tipo de actividades lúdicas y deportivas.

Este acreditado centro escolar, dedicado exclusivamente a la formación integral de señoritas, ubicado en la población de Poughkeepsie, en el estado de Nueva York, fue la cuna, donde se desarrollaron las primeras experiencias atléticas femeninas, siempre basadas en pruebas de fácil asimilación, básicamente, los salto de altura, longitud y alguna prueba de velocidad. Pero aún nada de lanzamientos.

Desde aquí empezó todo, aunque habría de decirse, que sin orden ni concierto en estos inicios. Solo bajo la iniciativa de alguna sociedad privada, o por iniciativa personal de muchas personas, que ya creían firmemente, que el atletismo femenino, tenía por delante de ellas un amplio camino a recorrer.

Es verdad que se empezó a caminar muy lentamente, con la tímida organización de algunas esporádicas competiciones, que con el paso de los años, serían reconocidas, como el inicio del atletismo femenino, por la propia Federación Internacional IAAF.

Pero esta trayectoria, no fue nada fácil. El primer escollo a salvar, fue la del propio Comité Olímpico (CIO) que nada quería saber de estos movimientos atléticos de la mujer, y menos incluir sus movimientos, en unos Juegos Olímpicos.

La aparición de la dama francesa, Alice Milliat, conocida, como la “Pasionaria” del deporte femenino, fue decisiva para reconducir sus actividades, fundando en 1919, la Federación Internacional del Deporte Femenino (FSFI) la cual condujo con mano maestra, hasta conseguir la paridad con los hombres, solo una década más tarde.

Esta histórica gestión, fue como agua bendita caída del cielo, para la consolidación definitiva del atletismo femenino, a nivel olímpico y mundial.

A partir de este momento, la presencia y fuerza de la FSFI, que ya tenía sus propios Juegos Mundiales para mujeres, como así mismo, sus propios ránkings mundiales, fue tan grande y decisiva, que la IAAF, no tardó demasiado tiempo en asumir bajo su control todas sus actividades. Para conocer en profundidad esta historia, entrar en el índice general de Noticias de esta página, de fecha 14-11-2006.

EL COMIENZO DE LA ERA OLÍMPICA FEMENINA EN ATLETISMO

Esto sucedió, en los Juegos de Ámsterdam de 1928, donde el atletismo femenino, ya tuvo su lugar natural, como participantes olímpicas, conjuntamente con los hombres, con una programación de cinco pruebas, pero todavía sin el lanzamiento del peso.

Pero a pesar de que el objetivo ya estaba conseguido, todavía quedaban por delante, muchos años de constantes reivindicaciones, para integrarse totalmente al calendario internacional, lo cual consiguieron de forma total con la prueba de los 20 km marcha, cuando la atleta china, Wang Yan logró en la ciudad de Guangzhow, la primera marca mundial oficial, el 19 de noviembre de 2001.

COMIENZA LA HOMOLOGACIÓN OFICIAL DE PLUSMARCAS

El primer reconocimiento oficial de lanzamiento de peso, por parte de la IAAF, se produjo cuando la alemana Gisela Mauermayer, lanzó la bola hasta los 14.38 metros, el día 15 de julio de 1934, en Varsovia, en el curso de un encuentro internacional, entre las selecciones de Polonia y Alemania. Por otra parte el primer titulo y plusmarca olímpica, no se produjo hasta los Juegos de Londres de 1948, pocos años después de finalizada la II Guerra Mundial.

Hay que señalar que esta disciplina, aún no estaba incluida, en los anteriores Juegos Los Ángeles en 1932 y Berlín en 1936. La nueva campeona en los mencionados Juegos de Londres de 1948, respondía al nombre de Micheline Ostermeyer, atleta representante de Francia, que con un lanzamiento de 13.75 metros, marcaba un hito histórico, en la cronología de una especialidad, la cual sería a partir de este momento, propiedad exclusiva de las poderosas lanzadoras de la Europa Oriental, que dominarían todos los listados internacionales, hasta nuestros días de hoy.

Los nombres de las soviéticas Galina Zybina, ocho veces plusmarquista mundial, de Tamara Press, con otras seis, y Nadezhda Chizhova, con siete, fueron las primeras abanderadas de este aplastante dominio, que finalmente pudieron romper las lanzadoras de la Alemania Oriental, al igual que lo hicieron la checa Helena Fibingerová y la búlgara Ivanka Khristova.

Pero muy pronto esta supremacía, volvería al país soviético, cuando Natalia Lisovskaya, actual poseedora del tope mundial, lanzó un tiro de 22.63 metros, en Moscú, el 7 de junio de 1987.

Como puede observarse, todas estas marcas fueron alcanzadas en las últimas tres décadas del siglo pasado, lo cual con el paso del tiempo ya en pleno siglo XXI aparecen nuevamente, todas aquellas dudas y rumores, que cuestionaban los tipos de preparación, como así mismo los métodos, empleados, por casi todas las lanzadoras, de la parte oriental de nuestro continente.

Repasando los registros, de las 10 mejores marcas internacionales “All Time” al aire libre, insertadas al final de este documento, se puede observar claramente, que en ella no aparece ninguna atleta después del año 1990, que fue cuando la china Xinmei Sui, lanzó en Pekín, sus 21.66 metros, el día 9 de junio de 1990, marca con la cual, se cierra el listado de las mejores lanzadoras mundiales de todos los tiempos.

APARECEN LAS PRIMERAS LANZADORAS ESPAÑOLAS

Los primeros síntomas de actividad de nuestras atletas, se produjeron, como en casi todas las disciplina, en las regiones de Guipúzcoa, Madrid y Barcelona, donde los estadios de Berazúbi y Montjuic, los únicos que teníamos en aquella época, empezaron a ver incrementada su precaria de asistencia de atletas con nuevas practicantes, donde la presencia de la mujer en aquella época, aunque también escasa era real.

Estas primeras evoluciones, dieron muy pronto sus frutos, con la consecución de la primera plusmarca española, a cargo de la catalana, Ana Tugas, conseguida en el curso de los Campeonatos de Cataluña, celebrados en el estadio de Montjuic de Barcelona, cuando lanzó hasta una distancia de 9.77 metros, el día 28 de junio de 1936. Esta marca no sería superada, hasta comienzos de la década de 1960.

Pero lamentablemente, todo quedó roto con el triste episodio de nuestra cruenta guerra civil. Con ella, desaparecieron todas las ilusiones y todo el trabajo realizado. Fueron cinco años de total silencio del deporte español, que no pudo reemprender sus actividades. hasta el comienzo de la década de los años 1940.

 

Como en muchos otros deportes, los primeros pasos de nuestras atletas, también estuvieron plagados de grandes dificultades. No hay que olvidar, que acabamos de entrar en una post guerra, llena de grandes dificultades, tanto políticas, como sociales, que lo que menos importaba, era el deporte amateur.

Pero el trabajo se reemprendió, con nuevas personas, nuevos entrenadores y antiguos atletas, buscando entre todos, conformar una mínima estructura, que nos llevara a recuperar el espacio perdido. Pero lo más importante, fue que nunca se arrojó la toalla, y sé continuo andando hacía adelante, en busca de este objetivo.

Como uno se puede imaginar, la presencia de nuestras chicas, sobre todo en lanzamientos, era casi inexistente en los años de 1940 y 1950. En la primera de las citadas décadas, apareció un nuevo club en Barcelona, el Hispano Francés, por iniciativa del centro escolar del Liceo Francés, que sería donde se centrarían, todas las actividades atléticas de aquel tiempo.

Fue en el curso, de uno de estos festivales, organizados en sus pistas de la calle Cerdeña, de la de la ciudad condal, cuando una de sus alumnas, Denise Huet, conseguiría la mejor marca de la década de 1940, con un registro de 7.44 metros, el 17 de junio de 1948.

Pero si hablamos de la década siguiente de 1950, tendremos que señalar, que casi toda ella, fue nula, referente a la actividad femenina. Solo en el último año de este decenio, se empezaron a realizar algunos movimientos, cuando un club del distrito de Gràcia en Barcelona, el C.A. Linterna Roja, organiza un encuentro contra el Hispano Francés, donde en la prueba del peso, aparece el nombre de Maruja Cabal , la cual gana con un tiro, de 8.52m el 4 de octubre de 1959.

Un mes más tarde, los días 8,15, 22 y 29 de noviembre, y 5 de diciembre, que son los meses donde se centra toda la actividad atlética femenina, Maruja Cabal, vuelve a mejorar su registro personal, cuando durante el curso de la prueba del Penthatlon, lanza el artefacto, hasta la distancia de 8.60 metros, el día 29 de noviembre de 1959, logrando la mejor marca de esta década.

GRANDES REFERENTES DE ESTA PRUEBA EN ESPAÑA

Siguiendo con la cronología, nos situamos en la década de los años 1960, donde cada vez es más firme la presencia femenina. Sería una guipuzcoana, María Concepción Laso, la que consigue el día 22 de mayo de 1968 en Pamplona, rebajar la legendaria plusmarca española de Ana Tugas, con un lanzamiento de 11.56, marca que un año más tarde, mejoraría la inolvidable Ana María Molina, todo un auténtico referente, de época moderna del atletismo en nuestro país, al lanzar en Girona, hasta los 13.12 metros, el 5 de octubre de 1968.

Para hacernos una idea, de lo lejos que aún estábamos de la élite europea, bastará decir, que al igual que los hombres, es a partir de este punto, cuando se empieza a reducir la abismal distancia, que nos separaba, con relación a las mejores lanzadoras europeas.

Hay que señalar que en aquel momento, la mejor marca mundial, estaba en poder de la soviética Tamara Press, con 17.42 metros, alcanzada en Moscú, el 13 de agosto de 1960, cuando todavía nuestra máxima nacional, era de 9.77 metros, en poder de la catalana Ana Tugas, conseguida en aquella lejana fecha del año de 1936, en Barcelona.

Es a partir de principios de 1970, cuando aparecen las primeras atletas, encargadas de abrir el camino definitivo, que tiene que conducirnos, a mejorar el listados de marcas de nuestro país, con registros, que ya empezaban a tener una cierta valoración.

Los nombres de Concepción Laso, Anna María Molina, Angeles Barreiro, Rita Lora, Margarita Ramos, fueron entre otras, las que dieron el testigo de esta progresión, a las emblemáticas Martina de Puente y Irache Quintanal, que supieron situar el nivel de esta disciplina, en el lugar natural que le correspondía, de acuerdo con la valoración global de nuestro atletismo.

De la incorporación de nuevas especialistas, entre las que destaca, Úrsula Ruiz, tercera mejor marca española de todos los tiempos, se pueden esperar nuevas superaciones, para consolida esta prueba, después del tantos retraso años de retraso.

TRES EMBLEMÁTICAS  LANZADORAS ESPAÑOLAS

LANZADORAS QUE MARCARON UNA ÉPOCA

Barris.org. Referentes históricas del lanzamiento de peso: una breve introducción histórica. España. Recuperado de: http://www.barris.org/index.php/es/pruebas-historia/96-espanol/espanol-pruebas-historicos/295-lanzamiento-de-peso-femenino