FUENTE: Barris.org

Alice Milliat

La aparición de una nueva Federación Internacional de las Mujeres (FSFI), constituida en el año 1915 con sede en París, llevó consigo una continua lucha entre este nuevo colectivo, liderado por la francesa Alice Milliat, conocida como la “Pasionaria del Deporte de las Mujeres”i el propio Comité Olímpico Internacional.

Esta prueba no tuvo su reconocimiento olímpico, hasta los Juegos de Atlanta de 1996. o sea 68 años más tarde de los Juegos de Ámsterdam de 1928, donde debutó el atletismo femenino. Pero antes de que esto sucediera, ocurrieron otras muchas cosas, que ocuparían una gran cantidad de folios para explicarlas.

Se dice que premeditadamente, en Amsterdam, el COI decidió de forma inesperada incluir en las 5 pruebas seleccionadas, la de 800 metros, cosa insólita porque los mandamases del Comité Internacional,.siempre expresaron su opinión de que las mujeres no podían correr distancias superiores a los 200 metros lisos, dado que esto podía ocasionar serios quebrantos para su salud e incluso afectar a su futura maternidad.

Esta sorprendente decisión, que pilló por sorpresa a todo el colectivo atlético femenino, resultó ser una prueba trampa, según la opinión de muchos técnicos, dado que eran muy pocas las mujeres preparadas ante este evento.

Esta sorprendente decisión, que pilló por sorpresa a todo el colectivo atlético femenino, resultó ser una prueba trampa, según la opinión de muchos técnicos, dado que eran muy pocas las mujeres preparadas ante este evento.

La ilusión de ser olímpicas provocó la inscripción de muchas atletas que nunca habían participado en una distancia tan larga. El resultado de todo ello, no dejó dudas a los medios de comunicación y técnicos atléticos de la época, cuando vieron que casi todas las participantes se retiraron, o quedaban extenuadas en el suelo, una vez traspasada la línea de llegada. Esta fue la excusa perfecta para eliminar para siempre, según ellos, esta disparatada prueba. En aquel momento los hechos les dieron la razón, pero la historia no se acababa aquí.

Todo ello conllevó que los medios de comunicación, fueran extremadamente críticos, cuando insertaron al día siguiente, titulares que no merecían estas históricas atletas. Uno de los mismos, reproducía lo siguiente:

“Ayer, allí abajo corrieron 11 desgraciadas mujeres, cinco de las cuales abandonaron antes del final y otras cinco se desmayaron tan pronto cruzaron la meta»

Fue tan grande el escándalo que estas escenas provocaron, que los cabezas pensantes del CIO no tardaron en reafirmar que el tope máximo para una mujer, era como queda expresado, los 200 metros.

LA FOTO HISTÓRICA DE LOS JUEGOS DE AMSTERDAM

La alemana Lina Radke y la japonesa Kinue.Hitomi,
en la final de 800 metros en Amsterdam de 1928

Pero con el paso de los años, el cambio de directivos llevaba aparejada el cambio de mentalidad de los mismos, no siendo hasta los Juegos de Roma de 1960, cuando aparece nuevamente una prueba superior a los 200 metros, con la inclusión de los 800 metros lisos.

Posteriormente al confeccionar el calendario de pruebas femeninas, este iba cambiando continuamente, siendo en Moscú-1980 cuando es incluida la otra prueba de medio fondo los 1500 metros. Siguiendo con este baremo, los Juegos de Los Ángeles de 1984, admiten por primera vez la prueba del maratón. Más tarde en 1988 en los Juegos de Seúl, la prueba de 10.000 tiene preferencia, ante los 5000 metros, en una competición olímpica.

Sería definitivamente, en los Juegos de Atlanta de 1996, cuando el 5000 metros, que venía reclamando su inclusión en unos Juegos desde muchos años atrás, ve cumplidos sus deseos y es admitida como prueba olímpica, cuando la atleta de China Wang Juncia, establecía la primera plusmarca de la distancia, con un tiempo de 14:59,88.

Sería definitivamente, en los Juegos de Atlanta de 1996, cuando el 5000 metros, que venía reclamando su inclusión en unos Juegos desde muchos años atrás, ve cumplidos sus deseos y es admitida como prueba olímpica, cuando la atleta de China Wang Juncia, establecía la primera plusmarca de la distancia, con un tiempo de 14:59,88.

Coloquialmente se podría decir, que en este caso, los primeros fueron los últimos, pero también por fin, se puede decir, que todas las pruebas de medio fondo y fondo, son desde este momento competiciones inamovibles, tanto en unos Juegos, como en unos campeonatos Mundiales Continentales.

LA ÉPOCA MODERNA DE ESTA PRUEBA

Como sucedió con los hombres, en principio fue un dominio muy acentuado de los países de Europa, los cuales muy pronto serían superadas por las del continente africano y asiático, de los cuales una de sus atletas Meseret Defar de Etiopia, detenta en la actualidad, la plusmarca universal, con un tiempo de 14:16,63, alcanzada en Sidney el día 15 de junio de 2007.

Aunque el historial olímpico se condensa en solo 5 ediciones, los 5000 metros femeninos, tienen una identidad propia, como queda demostrado, en todos los grandes festivales de alto nivel y en el ránking “All Time” donde se puede contemplar que todo él, esta conformado por atletas de la inagotable cantera de fondistas africanos.

Centrándonos en Europa, donde nació esta prueba, hay que destacar que nuestras atletas supieron aprovechar muy bien su momento, antes de la invasión de los atletas de África, siendo la irlandesa Sonia O’Sullivan la primera campeona mundial, un año antes de los Juegos de Atlanta, al ganar en el mundial de Göteborg con 14:46,47 en 1995, gesta que repitieron la rumana Gabriela Szabo por dos veces, en Atenas-97 Sevilla-99 y la rusa Olga Yegorova en Edmontón en el 2001.

DOS GRANDES REFERENTES DEL FONDO MUNDIAL

Así mismo la inglesa Paula Fudge obtiene de manera oficial, la primera plusmarca mundial al conseguir en la localidad de Knarvik la marca de 15:44,51 el día 19 de septiembre de 1981. Es la época preolímpica, donde destacaron atletas que dejaron su sello de calidad, como la noruega Ingrid Kristiansen, la sudafricana Zola Budd y las portuguesas Rosa Mota Fernanda Ribero, entre otras grandes atletas.

A partir de aquí, se acabo todo. El dominio de las atletas del continente africano como queda señalado, es abrumador y sin opción para ninguna otra atleta, de fuera de este continente, salvo alguna esporádica aparición de alguna corredora asiática o rusa.

LOS PRIMEROS MOVIMIENTOS EN ESPAÑA

Nuestro país, como siempre con un retraso abismal, por diferentes motivos no deportivos, tuvo que luchar, igual que los hombres, para encontrar su lugar en los listados internacionales, tema todavía pendiente, a pesar de alguna gran gesta de las atletas tanto en ampo a través, como en pruebas de fondo en ruta. Todavía hoy se esta luchando por encontrar este espacio.

Las apariciones de Carmen Valero, Cristina Petite, Angelines RodriguezTeresa RecioJulia Vaquero, en un ayer no muy lejano, como ahora con Judit Plá, las hermanas Isabel Dolores Checa, Marta DomínguezBeatriz Santiago, o Estívaliz Urrutia, son referentes a las cuales siempre se les recordará, especialmente a las primeras, por la precariedad de la época, por intentar consolidar las pruebas de fondo en España.

El actual récord español lo posee la atleta gallega Julia Vaquero con una marca de 14:44,95 conseguida en Oslo el 5 de julio de 1996.Un registro de gran calidad que permanece inalterable con el paso de los años, y muy cerca de los mejores listados mundiales.

DOS ACTIVOS DEL FONDO ESPAÑOL

Barris.org. Referentes históricos de los 5000 metros mujeres: unos antecedentes muy problemáticos. España. Recuperado de: http://www.barris.org/index.php/es/pruebas-historia/96-espanol/espanol-pruebas-historicos/258-5000-metros-femeninos